Si algo tenemos claro a estas alturas, es que los frutos secos son un alimento excelente para incluir en nuestra dieta. Nos encontramos ante un producto repleto de grasas saludables, altamente saciante y que, en pequeñas cantidades, es perfecto para formar parte de dieta saludable y equilibrada.
Dentro de los frutos secos, cada uno de ellos tiene unos beneficios específicos; uno de los que aporta más a nuestra dieta son las almendras. Este tipo, explica la dietista-nutricionista María Eugenia Fernández, es rico vitamina E, que resulta un potente antioxidante. Además, comenta que nos aporta 20 gramos de proteína por cada 100 de almendras; son una buena fuente de aminoácidos esenciales. «Asimismo, tienen un gran aporte de calcio, fósforo y magnesio, además de manganeso, zinc y hierro», añade la nutricionista.
Buenas para el cuidado de la piel
Uno de los fuertes de las almendras es su contenido en fibra. Por un lado, pueden ayudar en caso de estreñimiento, pues las almendras, dice la nutricionista, son uno de los frutos secos con más fibra, (8.3 gramos por cada 100). Por otro lado, gracias a su contenido en fibra, tiene un efecto saciante, por lo que puede ayudarnos a perder peso, tomando unas poquitas almendras como snack.
¿Cuántas almendras puedo tomar al día?
Sobre la ración diaria de almendras que podemos tomar, María Eugenia Fernández apunta que depende mucho de las necesidades calóricas de casa persona. «No será la misma cantidad si tu objetivo es perder peso o si es simplemente tener una alimentación saludable», dice. Sin embargo, apunta como recomendación general el "truco de la mano" para tomar una ración diaria. Esta cantidad, que sería la que cabe en el puño de una mano, tendría aproximadamente, dice la nutricionista 23 almendras, en las que habría «cuatro gramos de fibra, seis de proteína y la mitad de la vitamina E necesaria». «A nivel general, la ingesta recomendada de frutos secos diaria se encuentra entre los 15 y 30 gramos, pero ni todos los frutos secos pesan lo mismo, ni todos tienen la misma cantidad de calorías», especifica.
Para terminar, si hablamos de cómo podemos incluir las almendras en nuestra dieta, más allá de como snack, propone la nutricionista unirlas con elaboraciones vegetales. «Es muy útil a la hora de aportar sabor y textura a un relleno de verduras, y puede servir para enriquecer guisos a base de proteínas vegetales, como los de seitán y tempeh», dice. Asimismo, apunta que combina muy bien con ensaladas en frío, así como en el popular ajoblanco (sopa fría de ajo, almendras trituradas, pan y aceite de oliva). «La harina de la almendra es una extraordinaria alternativa en celíacos para espesar un caldo demasiado líquido, empanar filetes o elaborar croquetas», concluye.
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