La muerte de Ilias Tahiri, el joven de 18 años fallecido el pasado julio en el centro de internamiento de menores Tierras de Oria (Almería), fue "accidental". Ésa es la conclusión a la que han llegado los forenses del Instituto de Medicina Legal que le practicaron la autopsia y así se refleja en el informe definitivo enviado al Juzgado de Instrucción de Purchena, que investiga el caso y que disipa las sospechas de brutalidad que pesaban sobre trabajadores de ese centro.
El informe, al que ha tenido acceso EL MUNDO de Andalucía, señala, literalmente, que la de este joven interno fue una "muerte violenta de tipo accidental", al tiempo que descarta la hipótesis que se barajó en un primer momento, el uso excesivo de la fuerza por parte de los guardias de seguridad que contuvieron a Ilias en una habitación del centro. Señalan los forenses que no han detectado "signos objetivos" de que los guardias emplearan una "fuerza extralimitada" sobre el fallecido. No encontraron, aclaran, lesiones o signos "de sofocación" o de "compresión torácica intensa".
Ilias Tahiri, confirma la autopsia definitiva, murió a causa de un "fracaso cardiocirculatorio agudo secundario a una arritmia cardíaca" provocado, a su vez, por una serie de circunstancias entre las que sí citan los forenses el proceso de contención mecánica, aunque no como factor determinante. En todo caso, apuntan, el "estrés secundario" que le provocó al joven la inmovilización a manos de los guardias pudo tener alguna influencia, pero lo mismo que la hiperactivación adrenérgica de la propia agitación, los fármacos que se le encontraron en la sangre o el puente miocárdico que tenía en la arteria coronaria izquierda.
Pese a que descartan un uso excesivo de la fuerza, los forenses sí se muestran contrarios en su informe a la contención mecánica boca abajo, como la que sufrió el joven en Tierras de Oria, ya que, apuntan, supone un mayor riesgo de muerte en comparación con otras posturas.
La autopsia definitiva se conoce después de que el Juzgado de Purchena haya levantado el secreto que pesaba sobre las actuaciones que inició después de que el 1 de julio muriese en el centro de internamiento este chaval de 18 años, lo que puso en cuestión los protocolos que se seguían no sólo en Tierras de Oria, sino en toda la red de la comunidad autónoma.
De hecho, organismos como el Mecanismo Nacional para la Prevención de la Tortura, dependiente del Defensor del Pueblo Español, o el Comité de Prevención de la Tortura del Consejo de Europa habían censurado ya anteriormente en varios informes los métodos usados con estos menores privados de libertad, así como las condiciones de los centros, en especial de Tierras de Oria, haciendo especial hincapié en los métodos de contención.
A raíz de estos informes y, sobre todo, después de la muerte de Ilias Tahiri, la Consejería de Justicia dictó a principios de este mes una instrucción con el protocolo detallado que se debe seguir en todos los centros a la hora de inmovilizar a los internos. Así, por ejemplo, obliga a que siempre esté autorizado por el responsable del centro y que se haga bajo supervisión médica en todo momento.
Noticia compartida desde El Mundo.
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