Los almendros almerienses, en peligro por la falta de lluvias

La escasez de lluvias de los dos últimos años, sumada a la que se está registrando también en este 2014, están poniendo en jaque a miles de hectáreas almendros, un cultivo muy extendido en la provincia que es, de hecho, la segunda de Andalucía con mayor extensión. La cuestión es que al contrario que en otras zonas españolas, más del 90 por ciento de los almendros de la provincia son de secano, y apenas un diez por ciento se cultivan en régimen de regadío. Esta característica hace que la dependencia del agua caída del cielo se mucho mayor que en otros lugares. El problema es especialmente grave en las comarcas de Los Vélez y el Medio y Alto Almanzora, donde los registros de precipitaciones están siendo inusualmente bajos desde que terminara el año 2011, lo que ha generado un déficit de humedad en los suelos que amenaza no sólo a los cultivos de almendros, sino a otros como los olivos e incluso los cereales.

Voz de alerta Las organizaciones agrarias ya han alertado sobre la actual situación y aseguran que si no llegan lluvias de una intensidad apreciable en los dos próximos meses, la situación puede agravarse aún más, hasta el punto de comprometer la supervivencia de los almendros. El problema es muy similar al denunciado en la vecina Murcia por parte de Coag, pero en el caso de los murcianos ya han solicitado riegos de emergencia porque la mayor parte de su producción se realiza con el regadío y eso les permitirá recibir riegos de emergencia procedentes del trasvase Tajo-Segura. Los almerienses, al ser cultivo de secano, no podrán acceder a esos riegos de emergencia, por lo que su situación es aún más precaria.

Regar con cubas Ante este problema, que amenaza en primer lugar la cosecha de este año, y después la propia supervivencia de los árboles, algunos agricultores están optando por realizar riegos de mantenimiento con cubas. Es una opción cara, pero al menos podrá mantener en condiciones aceptables las plantaciones. La superficie dedicada al almendro en la provincia está establecida en alrededor de 15.000 hectáreas, pero se estima que podría rondar las 20.000 porque se trata de un cultivo muy extendido, en muchos casos con pequeñas parcelas o como complemento a otros cultivos.
Los buenos resultados económicos de los últimos años y la existencia de subvenciones animaron, de hecho, a muchos propietarios a plantar almendros. Sin embargo son precisamente los árboles más jóvenes los que están sufriendo más con la prolongada sequía, ya que los más antiguos, de diez o más años, pueden soportar mejor los periodos secos. Noticia publicada en La Voz de Almería.